La 'maldición del anfitrión' amenaza al Bayern

• El Bayern ya es el organizador que más lejos ha llegado alcanzando las semifinales

• Madrid (1957) e Inter (1965) sí ganaron la antigua Copa de Europa en sus estadios

  
  Un torneo de la trascendencia mediática de la Liga de Campeones depara infinidad de estadísticas y entre éstas llama la atención el hecho de que ningún equipo organizador haya disputado siquiera la final en su estadio. Es más, el Bayern de Múnich, ilustre semifinalista, ha roto una barrera alcanzando la penúltima ronda del torneo, que se disputa bajo este nombre desde la edición 92/93. Esta temporada, cabe recordar, la final se disputa en el Allianz Arena de la capital bávara.
  En esas 19 ediciones, la final se ha disputado en estadios tan importantes como el Santiago Bernabéu, el Camp Nou, Old Trafford, el Olympiastadion (antigua sede del Bayern), el Amsterdam Arena y el Giuseppe Meazza. Todos ellos sedes de equipos que han ganado el trofeo más importante del fútbol europeo en los últimos 20 años pero que no tuvieron la fortuna de poder levantarlo en casa.
  

  Sólo dos equipos han ganado la Liga de Campeones en sus respectivos países: Borussia Dortmund y Juventus

  El año pasado, sin ir más lejos, la final se disputó en Wembley, que es la sede de la selección inglesa. Tres equipos londinenses disputaron el torneo y los tres pasaron a octavos pero el Arsenal se quedó ahí y Chelsea y Tottenham sólo lograron avanzar hasta cuartos.
  En la 09-10 fue el Real Madrid el que pinchó en octavos frente al Lyon, la misma ronda en la que se despidió la Roma un año antes. Un poco mejor le fue al Manchester United, que llegó a cuartos en la temporada en la que Old Trafford acogió la gran cita final (02/03).
  Es más, sólo dos equipos han ganado la Liga de Campeones en sus respectivos países. Fueron el Borussia Dortmund, que derrotó a la Juve (3-1) en el Olympiastadion de Múnich, y la propia Juventus, que se impuso al Ajax (1-1) gracias a los penaltis (4-2) un año antes en el Olímpico de Roma.
  Si nos remontamos a la histórica Copa de Europa podemos hablar de dos equipos que sí pudieron cantar el alirón en su propio feudo. El primero fue el Madrid de Di Stéfano, que se impuso a la Fiorentina (2-0) en el Bernabéu en 1957. Le emuló, algunos años después (1965), el Inter de Milán, que venció 1-0 al Benfica en el Giuseppe Meazza.
  Sólo otro equipo ejerció como anfitrión en la finalísima de la antigua Copa de Europa pero no tuvo tanta suerte como Inter y Madrid. Hablamos de la Roma, que perdió ante sus incondicionales frente al Liverpool en los penaltis (4-2) tras el empate a uno con el que concluyó el encuentro.